El niño y la Navidad
Pedro Héctor Rodríguez
-"Mamita, ¿por qué Jesús en un establo nació?
¿Por qué no fue en un palacio, si él era el Hijo de Dios?"
-"Ay hijo, para enseñarnos que humildes debemos ser,
y que ayudar al más pobre es de todos un deber"
-"Mamita, cuando él nació ¿por qué todos no llegaron
al pesebre donde estaba, y postrados lo adoraron?"
-"Ay hijo, porque los hombres tan ocupados estaban,
que de las cosas sagradas muy poco se preocupaban
"Y no supieron que allí, sobre un pesebre dormía
el que venía a salvarlos, quien vida eterna traía"
-"¡Oh, qué triste es esa historia! Pero seguro que ahora
todos los hombres, mamita, a Jesús aman y adoran"
-"Ah, si todos, hijo mío, hoy pensaran como tú...
pero muchos son los hombres que no aman a Jesús"
-"Mami, aunque nadie lo ame, yo por siempre lo amaré,
y mi tierno corazón a Jesús entregaré"
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Puedes compartir este poema libremente en cualquier lugar. Sólo debes compartirlo tal como está escrito, incluyendo mi nombre "Pedro Héctor Rodríguez" como autor; porque asumo responsabilidad por lo que escribo
¿Para qué sirven mis dones Pedro Héctor Rodríguez Con los dones más preciosos, quería ser adornado
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¿Por qué tardas, Señor?
Pedro Héctor Rodríguez
-“Quisiera que la muerte no existiera ya más
No más odios, ni guerras, ni más enfermedad
Quisiera del dolor nunca más ver la cara
Quisiera que ya Cristo en gloria regresara
“¿Por qué tardas, Señor? ¿Por qué tanto esperar
a que vengas en gloria, y así llegue al final
la horrible pesadilla de la miseria humana?
¿Por qué tarda, Señor, la gloriosa mañana?
“¿Por qué tardas, Señor?” , pregunto en agonía
Y Jesús me responde: -“Mucho anhelo aquel día
en que a mis redimidos me llevaré al Edén”
Entonces yo le imploro: - “Señor Jesús, ya ven”
Y Cristo dice: -“Si hoy regresara a la Tierra,
no habría ya más odios, cesaría la guerra;
no habría ya más muerte, ni enfermedad malsana;
Yo pondría ya fin a la miseria humana
“¡Cuánto anhelo volver, y a mi pueblo tomar;
conmigo transportarlo al inmortal hogar!
Mas hay algo que impide mi inmediato regreso
Ya habría regresado ni no fuera por eso”
-“No tienes que decir ya nada más, Señor
Sé que hoy no regresas a causa de tu amor
porque hay multitudes que aún no han escuchado
tu bendito evangelio, tu amoroso llamado
“Por eso, hoy te pido que tu Espíritu Santo
me llene de poder, y que me llene tanto,
que sea tu palabra, en mi lengua, Señor
un clamor poderoso que llame a salvación
“Ya no preguntaré: '¿Por qué tardas, Señor?'
Porque sé que te tardas a causa de tu amor
Sólo te pediré cada día el poder
para que muchas almas a ti pueda traer”
“Y cuando todos oigan tu llamado amoroso,
entonces, en las nubes, te mostrarás glorioso
Entonces subiremos felices a tu lado,
a disfrutar la gloria que tu sangre ha ganado”
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Año nuevo, vida nueva
Pedro Héctor Rodríguez
“Año nuevo, vida nueva” es un dicho popular
que refleja los anhelos que muchos quieren lograr,
porque al comenzar el año, metas se traza la gente
con la sincera esperanza de superar su presente
Pero no siempre se logran los ideales soñados
Muchos sueños de cristal terminan despedazados
por las duras realidades que cual martillo golpean,
destrozando con crueldad los sueños que se desean
Hay quien sueña con dejar un vicio que lo encadena
Planea un futuro hermoso y de ilusiones se llena,
hasta que el vicio traidor logra otra vez seducir
a quien del maligno encanto había logrado huir
Y vuela el año cual ave, y llega el siguiente año,
y hay nuevas resoluciones que acaban en desengaños,
y como andar de borrachos es para muchos la vida
Van de tropiezo en tropiezo y de caída en caída
“Año nuevo, vida nueva” es un dicho popular,
y aunque a veces pareciera que no se puede alcanzar,
es un ideal hermoso que no debemos dejar,
porque es Cristo quien lo inspira y en él se puede lograr
Hoy, al comienzo del año, vuelve tu rostro a Jesús
y de su rostro divino contempla la hermosa luz,
y mantente a él mirando, porque en su luz hay poder
para que a cada enemigo, con él tú puedas vencer
Y si dejas de mirar a Cristo y caes herido,
no te quedes por un año allí en el piso tendido
Desde el suelo mira a Cristo, y él te dará su poder
En cada día del año, puedes con Cristo vencer
“Año nuevo, vida nueva”, vida nueva todo el año,
superando las caídas, derrotando los engaños,
porque quien a Cristo mira, cada día se renueva,
porque en la sangre de Cristo hay perdón y vida nueva
Vida nueva, nuevos planes para a Dios glorificar,
para, con su amor divino, su evangelio predicar,
para que de su rebaño, nada ni nadie nos mueva
hasta que Cristo regrese. “Año nuevo, vida nueva”
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