Su voz y su presencia
Pedro Héctor Rodríguez
Oigo la voz de Dios, mas no con mis oídos
Disfruto su presencia, mas no con mis sentidos
Su voz y su presencia percibo en mi interior
Me alienta o me reprende, mas siempre con amor
¿Cómo puedo saber que esta percepción
no es solamente el fruto de mi imaginación?...
Lo sé porque me habla de acuerdo a lo que él
me revela en la Biblia, que es su Palabra fiel
Y porque quiero hacer sólo su voluntad,
de acuerdo a su promesa, me guía a la verdad
Su voz me da consuelo cuando tengo aflicción,
me alerta cuando acecha la sutil tentación
Su voz acalla el viento cuando la tempestad
quiere hundirme en el mar de temor y ansiedad
Su voz también reprende cuando su voluntad
transgredo por descuido o necia terquedad
Su presencia me inspira a mi vida gastar
en anunciar que Cristo vino al mundo a salvar
Su voz me urge a ir, y a todos anunciar
que muy pronto en su gloria, Jesús va a regresar
Su voz y su presencia, que hoy conmigo están,
hasta que Cristo venga, conmigo seguirán
Este poema forma parte de mi libro "No desmayes, Peregrino", el cual puede ser adquirido en amazon.com